El Patriarca y Saori Kido, están preocupados por la desaparición de la Armadura de Sagitario. Mientras tanto Seiya llega a Jamir, pero solo encuentra a Kiki, quien le indica que en la cima de una montaña hay un manantial, donde fluye el Agua de la vida, con la que podrían devolverle la vista Shiryū. Seiya se dirige a la cima, a la cual llega luego de sufrir el ataque de la energía de la montaña. Allí, su bondad es puesta a prueba, y finalmente encuentra el manantial. Kiki, es atacado por Aracné, Santo de Plata, pero en ese momento llega Seiya y se enfrenta a él. Ayudado por Ushio, Santo de Acero, derrota a Aracné con sus Estrellas Fugaces de Pegaso.